Las Defensas

Saturday, June 16, 2007

Uno no se da cuenta de lo profunda de las heridas emocionales hasta que comienza a actuar de determinada forma, cuando empieza a sentir ansiedad, pena, angustia algunas veces, rabia. A veces las heridas son más hondas de lo que uno cree. A veces pensamos que ya superamos ese dolor, pero de golpe nos damos cuenta que aún no. Así son los procesos emocionales, largos y duros, sobretodo cuando se vivieron cosas muy dolorosas. Cuesta creer sinceramente que no volverá a ocurrir lo mismo, o que alguna persona distinta no te provocará el mismo dolor que antes te hicieron. Uno se asusta, se llena de miedo, se pone a la defensiva, por más que trate de no hacerlo, finalmente lo hace igual. Y duele, duele mucho. Sobretodo cuando tienes a alguien a quien amas, a quien quieres entregarte por completo y quieres recibirla por completo también de vuelta. Uno trata de explicar que no desconfías de ella, pero no puedes. Porque al fin y al cabo, sí estas desconfiando de ella. Y porqué?? Por algo que te pasó antes, por una persona con la cual estuviste un tiempo atrás y si bien fue una relación importante en su momento, no tuvo más trascendencia. Y eso es fácil de detectar, ya que por algo la relación se acabó. Pero sufriste, hiciste sufrir, pero el daño de vuelta fue muy grande. Te demoraste en ponerte de pie. Te defendiste, te protegiste del mundo. Y esas defensas, que te ayudaron a salir adelante, que te ayudaron a pararte cuando creías que nunca más lo harías, te obstaculizan ahora, te impiden ver que puedes ser feliz con otra persona, que la vida tenía prescrita otra cosa para ti y por eso tuviste que sufrir antes, cosa que para cuando apareciera lo que estás viviendo ahora, lo valoraras como tal y lo sintieras como un regalo, un milagro y aprovecharas la oportunidad. Y está todo listo para vivirlo. Se dio el momento, conociste a la persona, desde la primera vez que la viste supiste que ella era la indicada, no cabía dudas al respecto, todo se comienza a dar casi como una novela de amor. Excepto por un pequeño detalle, tus defensas están arriba, no han bajado, casi nada, te llenas de temor, de inseguridad, amas a esta nueva persona, pero tus defensas no te dejan vivirlo y vives en el pasado perfecto, imperfecto, pluscuamperfecto, en el futuro, en el condicional, hasta en la China. Pero menos... en el presente. Y haces daño y sufres tú, te desesperas, porque sabes que esta es tu oportunidad, sabes que esta es la persona que has buscado toda la vida y estás tan ansioso por vivirlo y concretar tu sueños y tan asustado porque no quieres que ocurra de nuevo lo que te pasó antes, aún sabiendo que antes estabas aprendiendo para y que ésta sí es la persona, pero te sigues defendiendo y mientras más tratas de no hacerlo, más lo perpetúas. Aunque por dentro sientas el amor más puro que jamás hayas imaginado o vivido.

A alguien le pasa algo parecido o solo soy yo??

3 comentarios:

Anonymous said...

Para todas las enfermedades creamos anticuerpos.

Y para las heridas del alma también.

Me ha pasado, pero con otras situaciones.

Pero la tónica del alma siempre es la misma

Anonymous said...

HAY ALGO CLARO, LA SITUACION EN SI...TE MARCARA...Y DRASTICAMENTE AUNQUE NOI LO QUIERAS...ASI SERA..Y SUFRIRAS...Y SERAS UNA VIEJA DOLDIA POR NO PODER SABOREAR BIEN EL AMOR...

AL IGUAL QUE YO Xd

UN SALUDO

CaleidoscópicaCaracola said...

..no eres el unico seguramente..pero acaso eso te quita el temor?
Además de el apoyo moral, de no sentirte tan extraño..mm..las cosas no cambian mucho con esa respuesta.
Y pasa que uno a veces esta super conciente de lo que sucede pero aun asi comete errores...o actua de la manera menos obvia...quizas se trate de eso, de que sientas de la manera mas profunda y valores.

Sonríe=)
si ella es la persona indicada, temas lo que temas, seguirá ahí para tí.
Saludos!